
Estrategia
MICROPROCESADORES Y PRODUCCIÓN DE AUTOS
Los microchips utilizados en los autos, son los mismos que en teléfonos inteligentes
En marzo de 2020 la OMS declaraba al COVID 19 como una pandemia, los gobiernos de los países se organizaron y determinaron medidas de seguridad para salvaguardar la integridad de la población de cada país tomando medidas que se se tradujeron en en un paro generalizado de la actividad económica como la conocíamos, dejando solo algunos negocios esenciales abiertos.
Conforme fueron pasando los meses y las medidas impuestas no eran sostenibles en el plano económico, los gobiernos fueron liberando la apertura de algunos giros con muchas limitaciones pero con la finalidad de reactivar la economía. En el caso de las plantas de manufactura de automóviles hubo paros de semanas e incluso de meses.
El paro de las fábricas causó un shock en toda la cadena de suministro para la fabricación de automóviles. El dato es que un automóvil a gasolina utiliza cerca de 30,000 diferentes piezas y la producción de cada auto se planea con meses de anticipación, basta con imaginar la cantidad de proveedores y fábricas alrededor del mundo que forman parte de esta cadena de suministro y los efectos que los cierres provocaron.
Afortunadamente para la industria, el inventario de autos existente en fábricas y concesionarios fue suficiente para la paulatina re activación, que conforme pasaban los meses se iba acelerando cada vez con más fuerza, hasta llegar al punto en donde el apetito por autos nuevos empezó a parecerse al de niveles en épocas previas a la pandemia.
Mientras todo esto sucedía y la humanidad estaba confinada a sus domicilios, se empezaron a consumir de manera digital más teléfonos inteligentes, más laptops para llevar a cabo el trabajo remoto, más televisiones inteligentes y más consolas de videojuegos para su entretenimiento en casa. Esto generó un pico en la demanda de este tipo de productos, afectando la cadena de suministro de estas industrias.
Los automóviles que hoy en día se producen, contienen tecnología de punta para hacer funcionar los gadgets que enamoran a los consumidores y las tecnologías de seguridad que son tan esenciales, estos avances requieren cada vez de más microprocesadores para su funcionamiento y conforme pasa el tiempo requerirán aún más. Estos son los mismos microprocesadores que utilizan los teléfonos, las televisiones y las consolas de entretenimiento.
Se presentó un fenómeno adverso para la industria automotriz, la demanda de microprocesadores por parte de los productos con alta demanda, absorbieron inmediatamente los excesos de inventario que dejaron los fabricantes de autos, pero en el camino los fabricantes de microprocesadores, se dieron cuenta que los podían vender con mayores márgenes que a las automotrices y en cantidades muy superiores.
El dato curioso es que se producen alrededor de 1,000 millones de aparatos electrónicos anualmente vs los 100 millones de autos y esta es la razón por la cual actualmente la mayoría de las armadoras automotrices siguen con paros de fabricación que afectan la disponibilidad de algunos de sus modelos y esto no se normalizará en el corto plazo ya que la inversión para incrementar la capacidad de las líneas de producción de microprocesadores es cuantiosa y tomará varios meses.
De acuerdo al último reporte de Automotive News, al 12 de marzo del presente año a nivel mundial, se estima que ha afectado a 1.76 millones de autos que no se han podido producir por este mismo tema que seguirá agravándose en tanto no se resuelva el abasto de estas piezas. Con esa situación en las manos, los fabricantes de autos destinarán microprocesadores a los modelos y países en donde sean más rentables con el fin de mitigar el efecto de los miles de autos que tenían proyectado fabricar y vender.
De esa misma manera el concesionario automotriz habrá de volver a analizar sus proyecciones para el 2021 y trazar planes para seguir optimizando todas unidades de negocio dentro de las agencias que no serán afectadas por esta crisis y así recuperar la rentabilidad que no podrán obtener de la venta de autos por falta de disponibilidad.
Incluso en mercados como el de EUA ya empieza a resentir un des abasto en autos seminuevos, toda vez que la falta de autos nuevos estimula la venta de autos seminuevos, el problema es que con la desaceleración del 2020, las grandes flotas y la baja en renovaciones de las mismas, afecta la disponibilidad de autos seminuevos.
La buena noticia es que los autos nuevos y seminuevos que se vendan, lo harán con muchos mejores márgenes!
Mar 25, 2021 POR Mario Zepeda
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